Te lo voy a decir sin pelos en la lengua, por si todavía dudas.
Las pantallas dejan a tu hijo con encefalograma plano.
O dicho de otra manera: les anestesian.
Upsss.
Creo que lo podría decir más suave y con voz de profesor de universidad
.Voy a ello.
Hace unos años el Dr. Chuck Hillman de la University of Illinois, descubrió que los niños de 7-9 años aprenden más cuando están en movimiento que estando parados.
Copio y pego:
"...Hillman ha comprobado a través de numerosos estudios que los niños y niñas que son más activos físicamente desarrollan mejores capacidades cognitivas, tales como la concentración, la creatividad, etc. Este elemento repercute directamente en su rendimiento académico, que aumenta".
Dicho esto.
Los niños aprenden más jugando que mirando un pantalla.
¿Por la pantalla en sí? No es que tenga nada contra las pantallas, pero sí que entorpecen su motricidad. Es básicamente porque están en bipedestación. ¿Y sabes? Si miras la evolución humana, estamos pensados y hemos evolucioando para movernos. Como ves, la clave para aprender es el movimiento. O dicho de otra forma: jugar. ¿Y qué puedes hacer tú para fomentar qué tus hijos sean más listos? Se me ocurren muchas cosas. Salir a pasear, ir a por higos al campo, patinar por el paseo, jugar a pases con una pelota o trepar un árbol. ¿Y qué puedo hacer yo? Recordártelo. MOVERSE y JUGAR: es un hábito maravilloso y el mejor regalo que le puedes hacer a tus hijos para que recuerden una infancia activa y en presencia de sus padres. No solo le haces un favor a él, sino a ti y a dos vuestros cerebros. ¿No me crees? Mira la foto de abajo.
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Escribo para inspirarte y hacer que no te arrepientas de cómo has criado a tus hijos (sin culpas, ni lamentos, sabiendo que lo has hecho lo mejor que has sabido). Día que no estás, aprendizaje que te pierdes.
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